Tras la reunión entre el Gobierno y las automotrices prorrogan el Procreauto

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Buenos Aires.- El encuentro entre la presidenta Cristina Kirchner y los representantes del sector automotor pasó a un cuarto intermedio y se retomará el miércoles. No se pudo anunciar un acuerdo entre las partes. Desde la Asociación de las Concesionarias, Abel Bomrad, informó que “cada terminal se va a reunir por separado con el gobierno, porque tienen problemas diferentes”.

Además se indicó que de ahora en más los encuentros serán «a nivel técnico», con los ministros como máxima representación oficial.

En la reunión estuvo la presidente Cristina Kirchner acompañada por los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Industria, Débora Giorgi, y el presidente del Banco Nación, Juan Forlón.

Por parte del sector automotor participaron por Ford, Enrique Alemany; por FIAT, Cristiano Ratazzi; por Renault, Thierry Cascas; por Wolkswagen, Joseph Fidelis Senn; por Peugeot, Luis María Ureta Sáenz Peña; por Honda, Hideki Kaniyama; por Toyota, Daniel Herrero; por General Motors, Isela Costantini; por Mercedes Benz, Joachim Maier; por Iveco, Natale Rigano y por Scania, César Luis Ramírez Rojas.

Asimismo, por SMATA estuvieron Oscar Romero, Gustavo Morán, y Ricardo Desimone, por ACARA Ricardo Salomé, Alejandro Saubidet, Alejandro Nadur y Rubén Rubén Beato, mientras ADEFA estuvo representada por Daniel Fernández.

Fuentes sectoriales indicaron que al concluir el encuentro quedó claro que la adhesión de las terminales a la nueva versión del ProCreAuto será voluntaria. También se acordó que el objetivo es lograr una venta de 40.000 autos para diciembre de este año.

Durante la extensa reunión los funcionarios del gobierno y los empresarios hicieron un repaso de la situación del sector, números de producción, venta y exportación, y se trazó una perspectiva de la industria en los últimos 10 años.

La Presidente había anunciado la semana pasada la prórroga del ProCreAuto hasta fin de año, ante su vencimiento fijado para el 24 de setiembre.

El anuncio fue en el marco de un conflicto con las terminales, a las que la jefa de Estado acusó de «encanutar» vehículos del plan a la espera de aumentos en sus precios.